Sobre tablas y por unanimidad la Cámara de Senadores de la Legislatura de Santa Fe expresó su deseo de que la provincia tome en sus manos la obra necesaria para superar la grave crisis de incomunicación que sufre el área metropolitana capitalina, que tiene sin su puente más directo a los núcleos urbanos de Santa Fe y Santo Tomé. El texto impulsado por el senador por La Capital Julio Francisco Garibaldi (PS) indica que el cuerpo de 19 representantes "vería con agrado que el Poder Ejecutivo evalúe la posibilidad realizar un análisis integral, tanto económico como técnico, sobre la viabilidad de la construcción de un nuevo puente a financiarse con fondos provinciales, que conecte las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé, en el departamento La Capital".
Al igual que el gobernador Maximiliano Pullaro y los funcionarios del área que han brindado expresiones en tal sentido, se deja aclarado que se trata de la iniciativa para que "de manera complementaria y paralela al Puente Carretero" haya otra estructura para la interconexión vial. En los considerandos, el legislador indica que hoy "las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé están unidas actualmente por la Autopista Rosario-Santa Fe ‘Brigadier General Estanislao López’ y el antiquísimo Puente Carretero, con más de 85 años de antigüedad", afectado por una grave avería y en situación de emergencia.
"A diario, miles de vehículos transitan por ambos accesos, evidenciando la necesidad de una conexión más moderna y eficiente. El Puente Carretero, concebido para otra realidad vehicular, se encuentra obsoleto y su deterioro contribuye al constante congestionamiento en las vías de acceso a ambas ciudades. Este problema afecta no sólo la movilidad de los habitantes, sino también el desarrollo socioeconómico de la región", observa.
"La construcción de un nuevo puente es urgente y necesaria. No solo aliviaría el tráfico actual, sino que también promovería el crecimiento equilibrado de la zona metropolitana. Sus beneficios son claros: 1) Mejora de la conectividad: Santa Fe y Santo Tomé, como centros urbanos importantes, requieren una conexión eficiente para facilitar el tránsito de personas y mercancías. Un nuevo puente reduciría la congestión y mejoraría la fluidez del transporte. 2) Diversificación de rutas: Un puente adicional proporcionaría alternativas de ruta, especialmente útiles durante trabajos de mantenimiento en el Puente Carretero actual, minimizando las congestiones y los riesgos de accidentes. 3) Beneficios socioeconómicos: La construcción del nuevo puente impulsaría la industria de la construcción e infraestructura, aumentaría el valor de las propiedades en Santo Tomé y contribuiría al desarrollo general de la región. A lo largo de los años, diversos intentos por concretar este proyecto han sido frustrados por problemas de financiamiento y gestión.
Con información de El Litoral