Finalmente, el Concejo santafesino aprobó los Mensajes N° 12 y N° 14 remitido por el Ejecutivo municipal a cargo de Juan Pablo Poletti: así, se derogó la ordenanza N° 12.635, de 2019, que intentó regular la actividad de los cuidacoches en la ciudad, pero nunca se aplicó en los hechos. Y se prohibió la actividad de cuidado y/o limpieza de vehículos en la vía pública de la ciudad capital.
Con ello, ni los vulgarmente llamados "trapitos" ni quienes laven autos ya podrán realizar esas actividades informales. No sólo eso: quienes infrinjan la prohibición quedarán sujetos a los alcances del Código de Infracciones de la ciudad, y del Código de Faltas provincial y sus modificatorias.
"Quienes en contravención a lo establecido precedentemente lleven adelante la actividad, sin perjuicio de las sanciones municipales y cuando sus conductas encuadren en sus previsiones, serán pasible del régimen sancionatorio previsto en las leyes provinciales N° 10.703 (Código de Faltas de la provincia), N° 13.744 y concordantes", dice el el artículo 3 de la norma sancionada.
¿Esto implica que los cuidacoches ahora podrían ser detenidos por las fuerzas policiales por incurrir en la contravención de ejercer esa actividad?
Este último artículo pone blanco sobre negro de cómo debería ser el accionar del control sobre este tema, algo que faltaba en la norma ahora derogada. Ejemplo: una persona está realizando la actividad de cuidacoches, que ahora queda prohibida en esta capital. Un inspector de control municipal se le acerca y le manifiesta que no puede realizar esa labor.
Declaraciones
"En este caso, si el cuidacoches no deja de realizar esa actividad prohibida, más allá que sea pasible de las infracciones previstas en el Régimen de Infracciones y Penalidades de la ciudad, y si el inspector va acompañado de personal policial, esa persona en contravención puede ser detenida. Pero si además el cuidacoches está, por ejemplo, bajo los efectos de alcohol o estupefacientes, es pasible de que se le aplique además el Código de Faltas y de Convivencia provincial", le explicó a El Litoral el concejal Carlos Suárez (Interbloque "Unidos…").
El debate político fue de aguas divididas. Jorgelina Mudallel (bloque PJ), por ejemplo, solicitó su abstención a la votación. Se discutió sobre la apropiación del espacio público de los cuidacoches y la conflictividad social, la situación de vulnerabilidad de estas personas (y qué abordajes de inclusión social implementar), y los casos de "extorsión" a los conductores, entre otros puntos de una problemática compleja.
Con información de El Litoral