El pasado martes a plena luz del día, un indigente apareció en la plazoleta central de la Manzana 11 del Fonavi San Jerónimo, en barrio Centenario de la ciudad de Santa Fe. Eran las primeras horas de la tarde y este hombre, con vestimenta andrajosa, se acercó a un grupo de amigos que compartía bebidas y algún cigarrillo.
El movimiento de gente en el lugar era importante. Muchos vecinos estaban fuera de sus domicilios y los chicos salían de las escuelas.
Algunos testigos pensaron que los amigos y el pordiosero se conocían, porque este hombre se acercó de manera "amigable". No está claro si cruzaron algunas palabras, si compartieron algo para fumar o si sólo se saludaron. Lo cierto es que el presunto mendigo no era otra cosa que un sicario, aparentemente disfrazado.
Él tomó por sorpresa a las víctimas, a traición, y abrió fuego con el arma que llevaba oculta.
Joaquín Baroni, de 20 años, fue quien llevó la peor parte. Al menos dos proyectiles impactaron en su cuerpo: uno en la espalda y otro en el glúteo izquierdo. El primero habría salido por el pecho y el segundo por el periné. Este joven ya estaba muerto cuando llegó al Hospital Cullen, trasladado por un automóvil particular.
Los otros tres amigos también fueron alcanzados por las balas.
Kevin L., de 19 años, fue herido por un plomo que ingresó por uno de sus glúteos y terminó impactando contra el fémur, lo que provocó una fractura expuesta. Él fue intervenido quirúrgicamente y permanece internado en sala común del mencionado hospital, "hemodinámicamente estable".
Un hombre de 49 años llamado Claudio F. tuvo mejor fortuna, porque el proyectil que hizo blanco en su cuerpo lo atravesó de pecho a espalda, pero no afectó órganos vitales. El mismo día del hecho, esta persona se fue del centro público de salud luego de firmar el alta voluntaria.
Quien permanece alojado en la Unidad de Terapia Intensiva en estado delicado es Isaías G., de 37 años. Un balazo le pegó en el pecho y provocó lesiones importantes. Los médicos continúan luchando, pero su vida aún corre peligro.
La causa
No trascendieron por el momento detalles sobre la investigación, que es guiada por el fiscal Gonzalo Iglesias.
El funcionario del Ministerio Público de la Acusación encomendó a la Policía de Investigaciones las medidas de rigor.
Los detectives buscaron imágenes en cámaras de vigilancia públicas y privadas de la zona. También hablaron con los testigos, algunos de los cuales vieron el ataque y otros observaron como el falso indigente abandonaba la escena del crimen, a la carrera y en dirección a lo que se denomina Villa de barrio Centenario.
Desde un primer momento, vecinos e investigadores señalaron que la balacera podía estar enmarcada en la guerra que libran desde hace años dos facciones de la barrabrava del Club Atlético Colón. Se rumorea que los atacados formarían parte de "La Negrada", enfrentados con "Los De Siempre". No obstante, por el momento, no sería la única hipótesis que se trabaja.
Con información de El Litoral