El Gobierno estimó que la inflación de septiembre terminó cerca del registro del 12,4% de agosto, lo que llevará el registro anual cerca del 140%. Fuentes del equipo económico contaron que “septiembre va a dar dos dígitos, todo por efecto arrastre, mayormente” de la devaluación del tipo de cambio oficial de fin de agosto del 20 por ciento.
“Estimamos un dato parecido al de agosto, cerca del 11% o 12%. Pero en las últimas tasas semanales que podemos medir vemos que estamos en una inflación mensual de 8% y bajando”, contaron las fuentes. Como anticipo, la Ciudad de Buenos Aires informó que la suba de los precios al consumidor fue del 12% el mes pasado y del 140,9% en un año. El Indec dará a conocer el índice de precios al consumidor (IPC) de septiembre el jueves 12.
Los funcionarios trataron de restarle dramatismo a la muy fuerte suba de los tipos de cambio alternativos. “Ahí estamos viendo el típico ruido preelectoral; la dolarización de cartera que es habitual antes de las elecciones”, destacaron. Sin embargo, la Aduana y la AFIP desplegaron en las últimas 48 horas fuertes operativos en la city para frenarlo (sin éxito) y la CNV colocó más trabas para operar con los dólares bursátiles.
De todos modos, admitieron que es muy probable que en octubre el índice de precios al consumidor se mantenga en los 2 dígitos. Con este dato mensual, la Argentina habrá superado con creces la inflación de Venezuela, que fue del 6% en septiembre (396% el último año, en una tendencia descendente).
La situación macro se refleja a la perfección en la micro. Un empresario del sector consumo dijo que “a los hiper y supermercados los productos ya están llegando con aumentos diarios, las grandes marcas están esperando a ver qué pasa con el dólar después del 22 de octubre y desde el Gobierno ya nadie controla nada porque la situación interna es anárquica”.
En tanto, los consultores privados que miden los precios semana a semana observaron que la inflación de septiembre terminó en torno del 11% y advirtieron que la suba del dólar de los últimos días se reflejará en otro índice de dos dígitos este mes.
En voz baja, algunos analistas del mercado ya estiman que en diciembre el índice de precios al consumidor puede llegar al 185%, aunque el último relevamiento del Banco Central arrojó un incremento del 170% este año. Sebastián Menescaldi, director de ECO GO, dijo que esperan “una inflación que se puede ubicar entre 10,6% y 12,3% este mes, según los distintos escenarios”.
“Este mes el arrastre es mucho más bajo respecto a septiembre y hay un conjunto importante de bienes congelados, pero la brecha y la actitud precautoria de los bienes y servicios libres van a volver a impulsar los precios al alza. La brecha va a terminar de definir bajo qué cota vamos a terminar”, alertó Menescaldi.
Lorena Giorgio de Equilibra sostuvo que “con un mercado financiero recalentado y un dólar oficial que seguiría anclado, no resulta extraño el ensanchamiento de la brecha cambiaria en el corto plazo”.
“La magnitud de esta suba dependerá también en gran medida de la expectativa que se forjen los actores económicos respecto a quién liderará el próximo gobierno y cuál será su equipo y su programa económico”, explicó la economista.
De este modo, “como prevemos que no habría suficientes dólares para intervenir y mantener la brecha a raya, tampoco habría divisas para pagar importaciones. Lo más probable es que, a menos que se active el segundo tramo del swap con China, los pagos de las SIRA ya aprobadas sigan siendo postergados”, estimó Giorgio.
“Es decir que el impacto sobre los precios vendría por una doble vía: el recalentamiento de la brecha y las restricciones de oferta debido a las dificultades para pagar importaciones”, explicó la analista de Equilibra.
“El impacto del salto del dólar oficial y las cotizaciones financieras tras la PASO sobre los precios ha sido muy significativo. A la inflación mensual de 12,4% registrada en agosto se le sumaría un registro en torno a 11,5% / 12% en septiembre”, precisó la economista.
“Hacia adelante, el combo de política fiscal expansiva para incentivar la demanda (el llamado “Plan Platita” de Massa) junto con limitaciones de oferta (por las dificultades para importar y saciar la mayor demanda) seguiría impulsado la inflación que ya llegó a dos dígitos y es cada vez menos probable que los abandone en lo que resta del año”, afirmó Lorena Giorgio.
“El registro de octubre sin dudas dependerá de cómo evolucionen las cotizaciones de dólares financieros y qué ocurra con las expectativas, pero es muy difícil que baje del 10%. Con esto, la inflación acumulada en todo el año superaría el 180%”, dijo la experta de Equilibra.
En tanto, Isidro Guardarucci de FIEL precisó que en septiembre el índice que elaboran desde hace varias décadas cerró en 10,9%. “Hacia el fin de mes fue bajando, con respecto a un principio donde se observó una aceleración fuerte. La velocidad del cierre del mes, en la última semana, fue de alrededor del 7% mensual”, precisó.
“Octubre arrancó a esa velocidad, pero con la última escalada del dólar no es obvio que se vaya a mantener así en los próximos días. Hoy el piso para el año es del 150%, afirmó Guardarucci.
“Pero ese número asume que vamos sin salto hasta el 31 de diciembre. Así que sumando algún ajuste razonable, el piso es 160%. Después, si estas subidas del dólar se hacen más frecuentes y lo que pase el 22 de octubre altera todo, vamos para arriba”, aclaró el experto de FIEL.
Por su parte, Camilo Tiscornia, socio de C&T, contó que “la inflación cerró bastante más tranquila en la última semana del mes con cual el arranque de octubre es abajo de 10, cómodamente”.
“Pero todo lo que viene pasando le va a meter mucha presión. El plan platita, la suba de los dólares financieros, la suba del agua, taxis. El año puede terminar en torno del 180%”, aclaró.
Todos los economistas aclaran que sus pronósticos están atados a lo que suceda en las urnas el 22 de este mes.